martes, 18 de mayo de 2010

La mujer y las lágrimas

-¿Por qué lloras, mamá?, le preguntó un niñito a su madre.
-Porque soy mujer, le contestó ella.
-Pero...¡no entiendo!, dijo el niño.
Su madre se inclinó hacia él y abrazándolo le dijo: Y por ahora no lo entenderás, mi amor...
Más tarde el niñito le pregunto a su papá: ¿Por qué mamá llora a veces sin ninguna razón?
-Todas las mujeres lo hacen...
...Era todo lo que el padre le podía contestar...
El pequeño niño creció y se convirtió en todo un hombre, preguntándose aún ¿Por qué era que las mujeres lloraban sin razón?
Un día se arrodilló y le preguntó a Dios:
-Dios... ¿Por qué lloran tan fácilmente las mujeres?
Y Dios le dijo:
-...Cuando hice a la mujer tenía que crear algo especial. Hice sus hombros lo suficientemente fuertes, como para cargar el peso del mundo entero, pero a la vez lo suficientemente suaves para confortarlo.
Le di una inmensa fuerza interior, para que pudiera soportar el dar a luz y también hasta el rechazo, que muchas veces proviene de sus propios hijos.
Le di la fortaleza que le permite seguir adelante, cuidando de su familia, sin quejarse, a pesar de las enfermedades y la fatiga, aún cuando otros se rindan.
Le di la sensibilidad para amar a sus hijos, bajo cualquier circunstancia, aún cuando esos hijos la hayan lastimado mucho...
Esa misma sensibilidad que hace que cualquier tristeza, llanto o dolor del niño desaparezca y que le hace compartir las ansiedades, dudas y miedos de la adolescencia.
Le di la fuerza suficiente para que pudiera perdonar a su esposo de sus faltas, y la moldeé de una de sus costillas para que ella pudiera cuidar de su corazón.
Le di sabiduría para saber que un buen esposo nunca lastimaría a su esposa, y también a veces le pongo pruebas para medir su fuerza y determinación para perseverar en la vida, a pesar de todo.
Pero hijo... para poder soportarlo todo...¡Le di las lágrimas, y son de ella exclusivamente, para usarlas cuando las necesite...Al derramarlas vierte un poquito de amor en cada una, que se desvanece en el aire y salva a la humanidad!

Anónimo